La sección mendocina de Vaca Muerta tendría una importante reserva de petróleo que permitiría reforzar el papel de la provincia.
En la lengua que abarca el sur de Mendoza hay más de 8.800 millones de m3 de petróleo, según estimaciones oficiales a partir de estudios geológicos, que especificaron que la formación Vaca Muerta en Mendoza, de 8.700 km2 extensión, tiene mayor riqueza en hidrocarburos líquidos que en gas, lo que pone a la provincia nuevamente en el radar de las petroleras, que ven la extracción de gas ralentizarse por limitaciones logísticas.
Según informó Mendoza On Line, se estiman recursos por más de 8.000 millones de m3 de petróleo, de los cuales podrían recuperarse 238 millones, equivalentes a más de 50 años de la producción anual de la provincia. Esta es una estimación conservadora basada en el menor conocimiento que tenemos de la geología de la formación al norte del río Colorado y todo indica que aún hay mayor cantidad de recursos aún sin evaluar.
Así, la explotación de la cuenca al norte del río Colorado tiene el potencial para garantizar el abastecimiento interno y generar exportaciones, cuando se estima que en tres décadas la producción de crudo mundial comenzará a declinar y el recurso a escasear.
El abastecimiento interno es clave en el territorio mendocino, ya que la refinería de Luján de Cuyo, con capacidad de procesamiento de más de 18.000 m3 por día, tiene serias limitaciones para abastecerse de crudo fuera de la cuenca cuyana y neuquina. Por ello, la venta y logística del crudo producido en la región estaría garantizada más allá de los vaivenes del mercado internacional.
El desarrollo de los recursos de la formación Vaca Muerta es clave para Mendoza, como lo es generar políticas claras que atraigan la inversión privada necesaria. El Decreto 248/18 fue una clara señal del Gobierno provincial, ya que detalla cómo serán las condiciones y controles ambientales para para que se desarrolle la estimulación hidráulica (o fracking), una técnica imprescindible al ser una zona poco porosa y casi impermeable.
Además, Mendoza proyecta la construcción de un parque de servicios en Pata Mora, con infraestructura vial, energética y servicios generales que facilitarán las operaciones. Esto, sumando al mejor clima de negocios de la provincia y a la menor conflictividad sindical, generan un ambiente propicio para las petroleras.
Según cálculos de la Dirección de Hidrocarburos, las inversiones necesarias para producir los 238 millones de metros cúbicos de crudo que aportaría Vaca Muerta en Mendoza ascienden a más de 20.000 millones de dólares. Como referencia, se puede decir que las inversiones petroleras en la provincia fluctúan entre USD 500 y 800 millones por año.
Hoy existe un proyecto piloto para extracción de crudo desarrollado por Phoenix y una de sus subsidiarias en Argentina, Petsa (petrolera El Trébol). Este piloto ya lleva USD 70 millones invertidos y ha fracturado 15 pozos con más de 60 etapas de fractura, teniendo programado la iniciación de su primer pozo horizontal en el 2019.
Además de Petsa, YPF está realizando los estudios de impacto ambiental para el desarrollo de dos proyectos piloto no convencionales en los yacimientos de Paso Bardas Norte y Cañadón Amarillo y Cnviia, a continuación de los trabajos que viene haciendo a muy pocos kilómetros al sur del río Colorado, añadió el medio.