Reclamo de portuarios

La situación generada a partir de la conclusión de las operaciones de la TRP fue analizada por los sindicatos del sector.

Podrían quedar sin trabajo alrededor de 750 trabajadores del Puerto de Buenos Aires.


Los gremios portuarios que integran la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina (Fempira) se reunieron con los integrantes del Consejo Directivo de la Federación, debido a la oficialización verbal por parte de la empresa Terminal Río de la Plata (TRP), a través de sus gerentes Patricio Untersander y Gabriel González, del cese de actividades de esa terminal a partir del 15 de mayo.
De la reunión participaron Juan Carlos Schmid, (secretario general), Raúl Huerta (secretario adjunto), Raúl Lizarraga (secretario de Asuntos Portuarios y Vías Navegables), Daniel Amarante (secretarios del Interior), Gabriel Presci (Apdfa) y Osvaldo Giancaspro (Secretario de Formación Profesional), para analizar la situación que atraviesa el sector y determinar el plan de acción a seguir.
Si bien desde el sector empresario explicaron que la decisión es internacional y no local, a nivel nacional dejaría, en principio, por acción directa de falta de prestación, sin trabajo a alrededor de 750 trabajadores del Puerto de Buenos Aires.
“A todo esto debe sumarse la falta de respuesta – vía notas presentadas en los Ministerios de Trabajo y Transporte que han tomado estado público a raíz de las repercusiones que generaron los medios – que tiene la FeMPINRA para lograr reuniones con los funcionarios del sector para tratar este grave problema”, señalaron desde la Federación.
Agregaron que “los ministros (de Transporte, Mario) Meoni, y (Trabajo, Claudio) Moroni, explicaron verbalmente que las licitaciones que se habían generado durante el gobierno anterior y que fueron rechazadas por la Federación estaban caídas, desde ninguna de las dos carteras surgió información escrita que confirmara esas palabras, por lo que se descuenta, siguen vigentes”.
Durante la asamblea, se expuso el deterioro en el manejo de las cargas y la disminución del volumen operado situaciones que tampoco tuvieron respuesta del Estado y las consecuencias directas y colaterales que genera esta situación que incluye el tema del dragado del Puerto y las dificultades que ello genera en la operatoria diaria.
“La situación está en un punto límite. Los trabajadores ven claramente en peligro sus fuentes de trabajo. La Fempinra sale a la escena y sigue bregando con todas las herramientas a su alcance por una solución a esta problemática. Y el Estado hace silencio”, remarcaron.
También se mencionó la situación por la que atraviesa la Administración General de Puertos (AGP), sin autoridad designada con la que se pueda iniciar una negociación y con el agravante de que en sus cuadros menores siguen desempeñándose con total naturalidad funcionarios de segundo rango que fueron nombrados y/o designados por la gestión anterior.
Los trabajadores facultaron a sus dirigentes para tomar las decisiones que pongan punto final a esta problemática o, por lo menos, despierten al Estado para que realice o lleve a cabo los movimientos que sean necesarios para solucionarla, incluidas las medidas de fuerza.