Se anunciaron duras medidas contra las líneas navieras a medida que se acumulan los contenedores en los puertos de los Estados Unidos.
Las Asociaciones de Camiones Estadounidenses emitieron una advertencia sobre la gravedad de la falta de camioneros.
Los puertos de Los Ángeles y Long Beach anunciaron que impondrán un recargo a los transportistas marítimos con contenedores que se queden en depósito en esas terminales más tiempo que el estipulado.
A partir del 1 de noviembre, los contenedores que estén en espera nueve días o más para el transporte por camión serán pasibles de una sanción, igual que los que esperen tres o más días en tren. El recargo comenzará siendo de 100 dólares por contenedor que se incrementará una cifra igual cada día.
Los transportistas marítimos y las compañías de camiones se han culpado mutuamente por la mayor parte de la acumulación de contenedores en los últimos meses. Durante ese período, el aumento de pedidos se incrementó, según explicó Michael Sasso en Bloomberg.
Tradicionalmente, los contenedores esperaban el transporte por camión durante menos de cuatro días en promedio, mientras que los que esperaban un tren lo hacían por menos de dos. Hoy, 40% de los contenedores en los puertos han estado allí el tiempo suficiente para activar los nuevos recargos, según el director ejecutivo del Puerto de Los Ángeles, Gene Seroka.
En tanto, más de 75 barcos fueron anclados frente a la costa de Los Ángeles el martes por la noche, pero quedaron impedidos de descargar hasta que se libere espacio para sus contenedores. Esta situación había sido prevista por los especialistas, según lo dicho por Alejandro Wolf, presidente de Yusen Logistics (Argentina) S.A., durante el Pre Encuentro de la Asociación Argentina de Logística Empresaria (Arlog).
Paliativos
Mientras la importación estadounidense de bienes en contenedores de envío se acerca a niveles récord, las principales compañías ferroviarias y de camiones tomaron sus propias medidas para aliviar la crisis de la cadena de suministro.
El gigante ferroviario Union Pacific está tratando de convencer a los transportistas marítimos para que entreguen contenedores a sus instalaciones de transferencia de Long Beach durante las horas de menor actividad del fin de semana. Para ello, utiliza un reembolso de 60 dólares por cada uno.
Las Asociaciones de Camiones Estadounidenses emitieron una advertencia sobre la gravedad de la falta de camioneros, con la esperanza de estimular alguna acción del gobierno. Actualmente, la escasez asciende a 80.000 conductores y se prevé que supere los 160.000 en 2030.
Esos datos hicieron prever que en los Estados Unidos hará falta contratar a casi un millón de conductores profesionales en la próxima década para reemplazar a los que se jubilan y poder hacer frente a la creciente demanda de carga, según consideró la entidad empresaria.
Por su parte, las entidades que nuclean a los comerciantes minoristas solicitaron al Congreso que apruebe un paquete de infraestructura por 1.2000 millones de dólares y que actualice las leyes de transporte para aliviar la presión sobre la cadena de suministro que está elevando los precios y generando escasez en las góndolas de los supermercados.
Las tarifas de flete marítimo para llevar mercancías desde China a los puertos de la costa oeste de los Estados Unidos alcanzaron los 20.586 dólares por contenedor de 40 pies en septiembre y, si bien han bajado hasta poco más de 16.000 dólares ahora, siguen siendo valores superiores al promedio prepandémico de 1.590 dólares.