Desde su planta metalúrgica y textil en Lanús, X-Urban ofrece una amplia gama de implementos para el transporte.
El transporte y la logística son la columna vertebral de casi todas las empresas. Con esa convicción, desde hace 20 años X-Urban, una metalúrgica instalada en la zona sur del Gran Buenos Aires, se ha dedicado al desarrollo y fabricación de elementos de sujeción de cargas a lo cual, en los últimos tres años, agregó telares para la confección de eslingas y cinchas.
Fue así que la empresa desarrolló la matricería completa para la confección de un crique para cinta de 25 mm, 50 mm pesado y liviano que, sumado a los malacates de 100mm ya existentes, completó la línea de sujeción de cargas y logró cubrir toda la gama de productos de sujeción de cargas demandada por el mercado local.
X-Urban “es una empresa familiar que inició Marcelo Zicarelli y tiene más de 40 años en el rubro metalúrgico, con más de 20 años en seguridad y, en los últimos tres años, comenzamos con la fabricación de las cintas textiles y a terminar el producto”, explicó Mario Zicarelli, director de la fábrica que dispone de 8.000 metros cuadrados, con 60 operarios, en el Parque Industrial de Lanús.
“Hasta hace tres años, trabajábamos para el que era lider del mercado en el rubro seguridad pero se dejó la relación cuando esa firma se vendió a un grupo internacional, y se tomó la decisión de comprar los telares en ingresar al rubro textil y desarrollar un producto con marca propia”, relató Facundo Cejas, quien agregó que “así logramos el fuerte de X-Urban que es ser la única fábrica integral en el país: tanto con la metalúrgica con la textil”.
La empresa se ha dedicado a cuatro rubros: izaje de cargas, sujeción de cargas, seguridad en altura y estructuras metálicas para líneas de vida; además implementó el diseño en su Departamento de Ingeniería y los ensayos en su propio Laboratorio para el control de materias primas, procesos y producto terminado, por lo que todos los elementos se mandan al mercado certificados, sin necesidad de recurrir a terceros.
Una industria integral y nacional
Debido a ser la única fábrica integral de estos implementos, otras empresas se dedican a lo mismo, importando las partes y armando los equipos. Por ese motivo, Cejas indicó: “le vendemos a la competencia, los herrajes, y con las restricciones a la importación, más. Aunque haya excepciones y se vayan cambiando las reglas de juego, por lo que a nosotros nos cuesta apostar a una industria 100% nacional y seguir los lineamientos de las políticas que a veces cuesta sostener”.
Lamentó el directivo que “en muchas ocasiones, nos encontramos con productos que se importan: productos terminados, herrajes, cintas. Ese es un aspecto con el que peleamos todos los días para tratar de seguir siendo competitivos, porque estamos muy limitados por los costos propios de la fabricación nacional”.
Por su parte, Zicarelli agregó que “al ser tan nuevos, nos tapó el mercado local, pero ahora vemos la necesidad de exportar. Importamos el poliester para las cintas -porque el metal lo compramos en el país- y su incidencia en el producto final es poca, lo cual nos ayuda a nivelar. Es poliester de alta tenacidad, una cláusula requerida en elementos de seguridad, que es importado de China, porque ni siquiera se fabrica en la región, ya que había una fábrica en Brasil que cerró”.
Seguridad en la carga
“En lo que son las líneas de vida somos muy fuertes por la metalúrgica, requiere de muchas estructuras metálicas y, dependiendo de las necesidades, por los distintos tipos de desarrollos, al tener la metalúrgica tenemos garantizada una pronta respuesta a los requerimientos del cliente” dijo Zicarelli.
Por su parte, Cejas afirmó que “las líneas de vida se utilizan mucho, por norm
as o exigencias de seguridad de la propia empresa, para lo que es trabajo que se desarrolla por encima de los dos metros de altura. Es necesario un sistema que asegure a ese operador”.
Destacaron la importancia de las torres en lo que es seguridad para el transporte. “En todas las playas de cerealeras y centros de distribución con camiones loneros, para la maniobra de quitar la lona o de estibar la carga o revisar una cisterna, el operador tiene que estar seguro vinculado con el arnés a un equipo retráctil montado sobre una guía, que viene de seis y 12 metros en estaciones simples o estaciones dobles para trabajos en simultáneo”, agregó Cejas.
Zicarelli continuó: “ las fabricamos hace diez años, pero cada vez son más requeridos porque las aseguradoras son más estrictas con los controles y las empresas tienen más normas de seguridad propias. Porque quien estaba arriba del camión en caso de caída no tenía forma de no golpearse, con estas líneas y estructuras se resuelve esta situación”.
Sujeción de cargas
Además, para el transporte, la oferta de X-Urban se ha integrado con toda la línea de sujeción de cargas, y la sujeción de cajas, malacates, con amplitud desde una sujeción doméstica, como puede ser una moto, hasta caños de gasoductos.
El responsable de Ventas de la empresa, Pablo Dionisi, explicó que “para sujeción está la línea standar que son eslingas de 1.000 a 6.000 milímetros, con distintos largos y también trabajos especiales como cinchones para levantar gasoductos, eslingas múltiples y perchas para que puedan bajar esos cinchones”.
“En la línea standar trabajamos en anchos de 30 a 150 milímetros, pero para esos cinchones se utilizan de 300 y hasta 700 milímetros, por lo que se van hilvanando para llegar al ancho requerido por la operación”, continuó y destacó que “para el rubro del petroleo hacemos torres de evacuación, y en minería también vamos desarrollando equipos para evacuación”.
NG-13 de agosto 2013 / Redacción Expotrade