Preocupación del autopartismo argentino por las consecuencias del conflicto en el sector de neumáticos sobre la producción, las exportaciones, el empleo y las inversiones.
La producción afectada es la de los vehículos cuyos neumáticos se han nacionalizado, mientras que las que mantienen su provisión con bienes importados no han sufrido ningún impacto.
El presidente de Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (Afac), Raúl Amil, expresó su preocupación por el impacto en la cadena de valor automotriz del conflicto entre el Sindicato Único de Trabajadores del neumático Argentino (Sutna) y las tres empresas del sector en el país.
Amil dijo que “el agravamiento de la situación provoca una importante pérdida de producción para la industria automotriz, con impacto en las terminales automotrices y sus proveedores, el mercado argentino de reposición y en las exportaciones; no solo de neumáticos, sino también de vehículos. Ello genera un alto riesgo de afectar el abastecimiento de los mercados externos, con el consiguiente impacto en la confianza y en la generación de divisas”.
Según Afac, “Una cuestión central para la fabricación de neumáticos en la Argentina de manera sostenible es la productividad que permite que la fabricación sea competitiva, marcando un diferencial con respecto a otras marcas que solamente tienen operaciones de importación”.
Para la entidad empresaria, eso “demanda tener costos comparativamente adecuados para poder competir en los mercados internacionales y poder hacer frente en el mercado doméstico a las importaciones originarias en países de alta escala, con esquemas laborales modernos y con incentivos estables a la exportación”.
Agregó que “ante el indudable rol de la tecnología en la mejora de la productividad, todas las empresas productoras de neumáticos han realizado relevantes inversiones que requieren no solo largos períodos para lograr su recupero, sino también mantener la confianza necesaria para continuar profundizando dicho proceso”.
“La productividad de las plantas locales es 25% inferior a la de las plantas radicadas en la República Federativa de Brasil, principal origen de las importaciones de autopartes en general, y neumáticos en particular”, consignó y sostuvo que “las pretensiones del sindicato de procurar triplicar (+200%) el valor de las horas trabajadas durante los turnos del fin de semana con respecto al valor normal, exceden la lógica productiva y económica y también van en contra de las prácticas usuales en la industria argentina”.
Afac afirmó que “el conflicto ha ido escalando a un nivel en el que Sutna ha llevado a cabo acciones contrarias a la ley que han impedido trabajar a quienes deseaban hacerlo a través de bloqueos sobre las plantas y acciones directas sobre las personas. La imposibilidad de encontrar garantías en la seguridad de los trabajadores que deseaban prestar servicios, sumado a los bloqueos, obligó a las empresas de neumáticos a cesar actividades de manera indeterminada”.
Añadió que “se están generando pérdidas de producción de vehículos y de las autopartes locales que los componen. Paradójicamente la producción afectada es la de los vehículos cuyos neumáticos se han nacionalizado, mientras que las que mantienen su provisión con bienes importados no han sufrido ningún impacto”.