En una era en la que el comercio electrónico es un canal cada vez más elegido, después de la Navidad, empieza la temporada alta de devoluciones por compras online.
Los errores de piqueo, arrepentimientos y regalos duplicados o idénticos se convierten en desafíos fundamentales para las empresas de logística.
La temporada navideña no solo trae la alegría de los regalos, sino también un incremento sustancial en las operaciones logísticas, especialmente en el contexto del crecimiento del comercio electrónico que, según datos publicados por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), facturó, en el primer semestre de 2023, 2.459.030 millones de pesos, lo que representa un incremento de 125% respecto del mismo período del año anterior.
En este escenario, si bien la llegada de Papá Noel marca el inicio de la temporada alta, para el sector es la época posterior a la Navidad la que se vuelve más compleja debido a la alta demanda de devoluciones.
Los errores de piqueo, arrepentimientos y regalos duplicados o idénticos se convierten en desafíos fundamentales para las empresas de logística.
Según Gabriel García, director de Operaciones en Celsur Logistica, “frente a este contexto ahora los consumidores priorizan políticas de devolución flexibles y la logística inversa se vuelve primordial.
“La capacidad de devolver productos adquiridos en línea de manera sencilla no solo fortalece la confianza del cliente, sino que también se erige como un factor clave para su fidelización. Por lo tanto, la experiencia de devolución, si no es exitosa, puede resultar en la pérdida de un cliente valioso”, explicó.
Desafío
Este aumento en la actividad de envíos y devoluciones impone un desafío a las empresas de logística, que deben prepararse anticipadamente para gestionar eficazmente este flujo incrementado. Además de los costos más elevados asociados con la logística inversa, las empresas deben considerar los tiempos de devolución establecidos por los comercios.
La logística inversa no es solo una cuestión de retorno de productos, sino un proceso que demanda una planificación meticulosa y recursos adicionales.
Para abordar estos desafíos, las empresas de logística deben incorporar medidas clave que incluye la expansión del espacio de almacenamiento para mantener la eficiencia; aumentar la flota de vehículos de distribución; contratación de personal adicional, y sumar un sistema automatizado y ágil de gestión se presenta como esencial para reducir las posibilidades de errores y facilitar las tareas de los empleados.
“La logística inversa no solo es un desafío operativo, sino una responsabilidad empresarial significativa. Las devoluciones se han convertido en una tendencia ineludible en esta nueva realidad comercial, y como empresa de logística, reconocemos la importancia de monitorear continuamente nuestros procesos”, continuó García.
“Estamos comprometidos en mejorar día a día mediante inversiones estratégicas en recursos y tecnología para hacer que nuestra operación en esta y en cualquier época del año sea más rápida y eficiente.” agregaron desde Celsur Logística.
Para los próximos años, se espera que la logística inversa sea una revolución importante en el mundo empresarial. La adaptabilidad y la capacidad de respuesta a las demandas cambiantes del mercado serán clave para el éxito continuo en este sector.