Los fabricantes de autopartes de la Argentina y Brasil manifestaron su preocupación ante los acuerdos que firmarán el Mercosur y la Unión Europea.
El 26 de febrero próximo, los representantes del Mercosur y la Unión Europea se reunirán en Asunción para avanzar en acuerdos que facilitarían el comercio entre ambos bloques. De cara a ese encuentro, los fabricantes de autopartes de la Argentina y Brasil manifestaron su preocupación ante la posibilidad de que las nuevas reglas afecten al sector.
Uno de los puntos que se negociará en esa cita será la reducción de gravámenes de los envíos de carnes hacia el Viejo Continente (que afectarían a países como Irlanda o Francia) a cambio de una medida recíproca respecto de los ingresos industriales, que los fabricantes locales advirtieron que podrían afectar sus intereses.
En una nota, “Sindipeças (Sindicato Nacional de la Industria de Componentes para Vehículos Automotores) y AFAC (Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes), representando a las principales empresas productoras de autopartes de Argentina y Brasil, quieren destacar algunos conceptos fundamentales sobre las negociaciones del acuerdo Mercosur y la Unión Europea”, arrancaron los industriales para manifestar su situación.
El texto fue enviado por los industriales a los ministros de Producción de Argentina, Francisco Cabrera; a su colega de Brasil, Marcos Jorge de Lima, y a sus pares de Relaciones Exteriores.
El sector se sería uno de los más afectados porque se beneficia de aranceles externos relativamente altos. Los autos terminados tributan aranceles del 35 por ciento, las materias primas un 10/12 por ciento, moldes y matrices un 35 por ciento y otras piezas en promedio un 6,5 por ciento.
Los autopartistas consideraron “fundamental que haya un período de transición a la apertura comercial plena en 15 años, incluyendo en este período los primeros siete años de carencia de desgravación para iniciar la vigencia de las preferencias arancelarias. Es fundamental que la cadena de vehículos y sus partes tengan un mismo cronograma de velocidad de desgravación”.
Al respecto, según un estudio de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo, el acuerdo podría afectar unos 186.000 puestos en la Argentina, de ellos 32.500 serían del sector de autopartes y 9.500 del automotor. En Brasil, la cifra sería mayor, debido a la incidencia de esta industria en la economía de ese país.