La CNRT realizará este sábado test de alcoholemia a conductores profesionales de transporte de carga y pasajeros.
La ANSV, provincias y municipios realizarán controles a conductores particulares.
Este sábado 30 de abril la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) -organismos del Ministerio de Transporte- las provincias, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y decenas de municipios realizarán en conjunto la edición número 17 del operativo Alcoholemia Federal. Con miles de controles en todo el territorio nacional y en simultáneo, se busca controlar la circulación de conductores en estado de ebriedad y concientizar sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol.
En la edición de marzo, 3% de los test de alcoholemia fueron positivos, de los cuales mayormente se trató de motociclistas de entre 18 y 45 años. Del informe realizado por el Observatorio Vial de la ANSV, se destaca que 95% de los conductores controlados registró alcohol cero en sangre.
La Alcoholemia Federal se realizó por primera vez en diciembre de 2020 y desde su implementación se redujeron un 50% las alcoholemias positivas registradas, fue 8% de casos positivos en la primera edición.
En esta nueva edición también se reforzarán los controles a conductores profesionales de transporte de cargas y pasajeros a través de las fiscalizaciones de la CNRT en sus delegaciones, subdelegaciones y bases operativas. El organismo, además, continuará fortaleciendo las verificaciones de documentación y estado general de cada vehículo. De esta manera, a partir de la articulación conjunta habrá una cobertura estratégica y coordinada en todas las provincias argentinas.
En la Ciudad de Buenos Aires habrá nueve puntos de control distribuidos en distintos tramos de la Avenida General Paz. Desde febrero de este año en CABA, los conductores que pasen el límite máximo tolerado de alcohol en sangre (0,5 gr/l para vehículos particulares, 0,2 gr/l para motociclistas y 0,0 gr/l para principiantes y conductores profesionales) se les retirará la licencia de conducir y quedarán inhabilitados para manejar un vehículo entre dos meses y dos años.
Consecuencias
Las consecuencias del alcohol al volante son que en uno de cada cuatro siniestros viales fatales se detecta alcohol en sangre en alguno de los conductores; circular con alcohol en sangre, por mínima que sea la cantidad consumida, aumenta 3 veces las posibilidades de causar un siniestro vial.
Además, beber alcohol y conducir puede generar una falsa sensación de seguridad que puede alentar a exceder los límites de velocidad permitidos y no usar el cinturón de seguridad o casco; según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de alcohol potencia otras causas de siniestros viales como la fatiga, la somnolencia y la distracción, y el alcohol al volante afecta las facultades visuales, disminuye la capacidad de concentración, altera la toma de decisiones y enlentece los tiempos de reacción.
El ministro de Transporte de la Nación, Alexis Guerrera, dijo: “Las cifras de reducción de casos de alcoholemia positivas a la mitad son el ejemplo de lo que pasa cuando una política pública que busca generar conciencia es sostenida en el tiempo: cada vez son más las personas que se suman a la enorme mayoría que acompaña y entiende que atrás de ese control está el cuidado de la vida”.
Por su parte, el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano, expresó: “Continuamos impulsando el proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante en el Congreso de la Nación y esperamos que pronto pueda avanzar esta iniciativa que la sociedad reclama su debate hace tiempo. Con esto buscamos que no haya especulaciones y que los conductores no calculen cuánto se puede tomar para manejar sin consecuencias ante un control, porque lo que hay que entender es que tomar y conducir siempre tiene consecuencias y es la causa de miles de muertes evitables todos los años”.