La Comisión de Transportes de la Cámara baja comenzó a discutir el proyecto para evitar el consumo de bebidas alcohólicas antes de conducir.
“La normativa actual de 0,5 como límite para conductores particulares invita a la especulación”.
El proyecto de Ley de Modificación del Código Penal y de las Leyes 24.449 y 24.788, denominada Alcohol Cero al Volante, comenzó a ser debatida por la Comisión de Transportes de la Cámara de Diputados de la Nación.
El texto fue elaborado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, el Ministerio de Salud y la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (Sedronar), y fue presentado por el diputado Ramiro Gutiérrez, y el ex diputado Facundo Moyano.
El director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano, fue invitado por la Comisión para responder sobre esta iniciativa, que busca establecer que el límite permitido de alcohol en sangre para la conducción en todo el territorio nacional sea cero.
En la Argentina, el límite permitido para circular es 0,5 gr/l para automovilistas y 0,2 gr/l para motociclistas. Sin embargo, las provincias de Córdoba, Salta, Tucumán, Entre Ríos, Jujuy, Río Negro y Santa Cruz, y ciudades como Mar del Plata, Santa Fe, Rosario, Posadas, Moreno, Tigre y Ezeiza, entre otras, tienen normativa de alcohol cero en sus territorios.
En esas jurisdicciones, a través de los resultados recabados por el operativo Alcoholemia Federal que lleva adelante mensualmente la ANSV junto a todas las provincias y decenas de municipios, se evidencia una mejoría en los controles, donde hay muchísimos menos conductores circulando con presencia de alcohol en sangre.
El alcohol cero también rige en países limítrofes como Uruguay, Paraguay y Brasil. Según el Ministerio de Salud de Brasil, luego de dos años de vigencia de la ley, Río de Janeiro, por ejemplo, tuvo una reducción del 32% en las muertes por siniestros automovilísticos.
Los resultados obtenidos muestran reducciones significativas en los siniestros fatales en Uruguay, en los siguientes 12 (-20,9 %) y 24 meses (-14,1 %), luego de sancionada la Ley (período 2016-17). En el “Informe Anual de Siniestralidad Vial 2019” se reporta que sólo en el 7% de los siniestros se detectó presencia de alcohol en sangre.
Martínez Carignano dijo: “Que se comience a analizar la posibilidad de establecer el alcohol cero al volante en Argentina es un gran paso para la seguridad vial. Queremos un país con muchos menos muertos y heridos en las rutas, y sabemos que el alcohol es uno de los principales causantes de esta realidad”.
Consideró que “la normativa actual de 0,5 como límite para conductores particulares invita a la especulación sobre cuánto alcohol es posible tomar, cuando lo que hay que entender es que bebiendo una sola copa la capacidad de conducción ya no es la misma”.
“Creemos que la sociedad en su enorme mayoría quiere un país en el que no se permita beber alcohol y manejar, con un Estado que baje un mensaje claro a favor de la vida. El debate sobre este punto, crucial de cara al futuro, debe darse a través de los representantes democráticos del pueblo. Cada vez estamos más cerca”, finalizó director ejecutivo de la ANSV.