La caída en la calidad de las carreteras brasileñas se señaló en un informe de realizado por los empresarios del autotransporte de cargas del país vecino.
Los recursos invertidos fueron los más reducidos de los últimos 16 años.
La calidad de las rutas brasileñas se ha deteriorado desde 2018, incluida la señalización de bajo costo. En un año, los problemas aumentaron en 59%, según la 23a Encuesta de Carreteras 2019, realizada por la Confederación Nacional de Transporte (CNT), para evaluar el estado de 108.000 kilómetros de la red federal pavimentada y los principales tramos del estado en las cinco regiones del país.
Según la muestra hubo empeoramiento del pavimento (52.4% con problemas), señalización en 48.1% de los tramos y geometría vial en 76.3% de los caminos analizados. El año pasado, la evaluación había sido 50.9%, 44.7% y 75.7% con problemas, respectivamente.
Según el trabajo, el deterioro en las condiciones de las autopistas incluyó caminos de concesión, aunque todavía fueron mejores. El diagnóstico encontró que en los 108.863 kilómetros encuestados, los puntos críticos aumentaron en 75,6%. Pasaron de 454 en 2018 a 797 en 2019.
«No tenemos buenas noticias», advirtió el presidente de la CNT, Vander Costa, cuando difundió en Brasilia los resultados de la encuesta realizada por 24 equipos de investigadores entre el 20 de mayo y el 18 de junio, ante la prensa y a representantes del Ministerio de Infraestructura, la Agencia Nacional de Transporte Terrestre, el Departamento Nacional de Tráfico y legisladores.
Los datos fueron detallados por el director ejecutivo de CNT, Bruno Batista, con especificaciones sobre la situación de las carreteras bajo administración pública y otorgadas; la infraestructura de apoyo, como tramos con estaciones de servicio, talleres de reparación de neumáticos, concesionarios, talleres mecánicos, restaurantes y bares disponibles.
Según la CNT, los recursos invertidos fueron los más reducidos de los últimos 16 años y el pronóstico es que el presupuesto enviado por la administración de Jair Bolsonaro, al Congreso para 2020 no permitirá mayores inversiones.
Para Costa «acelerar la privatización, es la mejor alternativa para un gobierno descapitalizado», pero advirtió que será «necesario asegurarse de que se cumpla lo que está en el contrato». Se destacó, durante la presentación, la influencia del estado de las carreteras en la seguridad y el confort del usuario y se remarcó que la calidad del asfalto utilizado también disminuyó.
En 2019, se calculó que el promedio nacional de las deficiencias resultaron un aumento de 28.5% en el costo operativo del transporte, equivalente a la compra de 5.000 camiones nuevos. El índice más alto se registró en la región Norte, con más de 38,5%.