Crédito de Japón para los ferrocarriles

El JBIC, organismo de crédito internacional japonés, confirmó la cesión del primer crédito que recibe la Argentina de una entidad de ese tipo en más de 20 años, con el que se comprará el equipamiento para equipar a las líneas ferroviarias con frenado automático.

Tras más de 20 años, el JBIC, organismo de crédito internacional japonés, otorgará a la Argentina un crédito con financiamiento por 53 millones de dólares, destinado a la adquisición del equipamiento de frenado automático de trenes.

El préstamo, en el que también participan el Deutsche Bank AG y NEXI (Nippon Export and Investment Insurance) tiene un plazo de seis años y medio, dos años de gracia y una tasa de interés anual del 2,61%. El último acuerdo financiero entre Japón y Argentina había sido firmado en 1997. Con este préstamo, se cubrirá el 85% de los equipos necesarios para implementar el sistema que está siendo producidos en Japón.

El sistema ATS reduce al máximo el riesgo de accidentes, ya que gracias a la tecnología se activa el freno automático de los trenes si se excede la velocidad máxima permitida o se transgrede un semáforo en rojo. Su implementación requiere la compra de tecnología y la ejecución de obras civiles para adaptar la infraestructura vigente.

Gracias al acuerdo se completará el proceso previo a la instalación del nuevo sistema en 280 formaciones y 1.500 kilómetros de vías. A la fecha, Trenes Argentinos Infraestructura está llevando el plan de ejecución en cinco de las ocho líneas del AMBA y consiste en la modernización o adecuación de cableado subterráneo, semáforos lumínicos y otras instalaciones para generar las condiciones necesarias para instalar los nuevos equipos japoneses.

En Argentina únicamente el 10% de toda la red metropolitana cuenta con ATS. Pero este porcentaje se irá revirtiendo progresivamente en los próximos años: en las líneas Urquiza, San Martín, Belgrano Sur, Belgrano Norte y Sarmiento el sistema estará instalado y funcionando para 2018 y, en 2019 en las líneas Mitre y Tren de la Costa, más los ramales pendientes de la línea Roca.

La incorporación del frenado automático de trenes forma parte del Plan Integral de Obras Ferroviarias de 14.000 millones de dólares que puso en marcha el Ministerio de Transporte.

El sistema de frenado automático de origen japonés ATS se compone de tres dispositivos: una señal o semáforo y una bobina conectada a él al lado de la vía; más una antena a bordo del tren, ubicada en ambas cabinas. La señal o semáforo al costado de la vía tiene cuatro lámparas que le indican al tren si puede avanzar, con luz verde; si debe detenerse, con luz roja o señal de peligro,  o bien reducir la velocidad a menos de 80 kilómetros por hora, con dos luces de color.

 

12 de septiembre de 2017 – ep