El último domingo, Boca Juniors volvió a levantar la copa Iveco al consagrarse campeón del torneo de Primera División Julio Humberto Grondona, del fútbol local -luego de casi cuatro años, después de aquel título que ganara en el Apertura 2011- gracias a un gol de cabeza que convirtió Fabián Monzón, en el final del primer tiempo.
Boca levantó la copa diseñada por el viedmense Martín Maturana, un estudiante de 23 años, de Diseño Industrial de la Universidad Nacional de La Plata, cuya creación fue elegida entre otros cuatro finalistas.
Maturana había dicho, días atrás, que era «muy emocionante estar terminando la carrera y poder ganar un concurso tan importante a nivel nacional. Me llena de orgullo y me confirma que la carrera que elegí verdaderamente es lo mío».
El joven explicó que el principio del diseño se basó en dos triángulos enfrentados: «Al ser la figura geométrica más estable y de mayor rigidez en las estructuras, visualmente, el trofeo se concibe como un diseño firme y preponderante».
«Las líneas -precisó- se basan en la morfología de una copa tradicional, presentando en su diseño características de pertenencia como agarres laterales, una base y vaciado en su cuerpo», en tanto que «uno de los triángulos invertido representa la industria en crecimiento».
Por su parte, Fernando Poggio, constructor de la Copa Iveco, es un diseñador y artista plástico argentino que desde hace 20 años trabaja en el diseño, realizando piezas con identidad propia y gran sofisticación. Es especialista en el diseño y producción de prestigiosos premios, como el MTV MusicAwards, el MTV GamesAwards, AXN Film Festival, Premio Sur de La Academia Nacional de Artes Cinematográficas, Puro Diseño, Círculo Creativos, entre otros.
Muchas de sus obras se concretaron en aluminio trabajado con técnicas innovadoras y únicas en el mercado y se encuentran en el Museo Malba, de Buenos Aires; Museo Thyssen Bornemisza, de Madrid; Samflax, de Nueva York; Vinçon, de Barcelona/Madrid; y tiendas de diseño en Australia, Chile, Holanda, Nueva Zelanda y Uruguay.
Esta fue la décima ocasión en la que Iveco convocó al certamen, que tiene como finalidad ofrecer la oportunidad de que estudiantes de Diseño Industrial, Arquitectura, Arte y Diseño Gráfico de todo el país puedan demostrar sus conocimientos para plasmarlos en el trofeo y las medallas que recibieron los campeones de Primera División.
Afianzado como uno de los certámenes de diseño más importantes a nivel nacional, “Diseñá una pasión” surgió en 2010, año desde el cual los campeones de la máxima categoría del fútbol nacional reciben la Copa diseñada por estudiantes universitarios de nuestro país. Más de 450 jóvenes han participado de este concurso que edición tras edición varía los motivos que guían el diseño del trofeo y las medallas.
NG – 3 de noviembre de 2015 /
