Las necesidades y consecuencias de mejorar las aplicaciones en depósito en un marco de pandemia, fueron analizadas por tres profesionales del sector.
“La tecnología está al alcance de todos y por sí sola no funciona, hay que revisar los procesos”.
La pandemia y sus consecuencias sobre el comercio electrónico hicieron que el momento de modernizar las operaciones del almacén fuese hace tres o cuatro meses, según consideró Ana María Cabrales, gerenta Senior de Mercadeo de Soluciones de Zebra Technologies, durante un webinario que compartió con Martín Galeano, gerente de Canales de la empresa, y Ricardo Lavié, supervisor de Mejora Continua Mercado Envíos Logística, en Mercado Libre.
El encuentro virtual “Diversificación de la Cadena de Abastecimiento: ¿Es necesario modernizar las operaciones del Almacén?” giró en torno de la aplicación de tecnologías en los depósitos a partir del incremento del uso del comercio electrónico ante las derivaciones de la pandemia.
Lavié consideró que “el norte es cómo pensamos aplicar las tecnologías”, ante el nuevo contexto y la necesidad de escalar en un marco impredecible. “La herramienta está, el valor agregado es empezar a utilizarla. Empezar a entender todo el producto completo y apalancarlo con la tecnología y que impacte positivamente en la experiencia del usuario”, sostuvo.
Para Galeano, se debería “romper con el status quo. La lejanía que sentíamos hacia la tecnología, la realidad nos demostró que no es así, en la región hay muy buenas compañías, hay profesionales muy capacitados y desarrollos muy interesantes”.
“La tecnología está al alcance de todos y por sí sola no funciona, hay que revisar los procesos, Puede que lleve algunos meses entender cuáles son las oportunidades de cambio pero, desde el lado positivo, cada uno de ellos va a repercutir en soluciones para el cliente”, acotó Cabrales.
Los cambios
El gerente de Canales de Zebra explicó que en los últimos años “se veía el aumento de la incidencia del comercio electrónico en la región, pero el 2020 fue disruptivo, debido a cómo se encaró la cuarentena y cómo incidió en los consumidores”.
Observó que “desde mayo y junio se acomodó toda la cadena. Hubo un incremento de 106% de facturación de operaciones en línea, con 54 millones de órdenes de compra, y pasaron de 60 a 39% en 2019 las compras en línea. La participación de este canal era de 18% y se elevó a 49%, en las empresas que ya lo tenían implementado”.
Entre los cambios, consideró la continuidad de las tiendas físicas con nuevas funcionalidades; además apuntó a la mayor complejidad de la logística inversa con las devoluciones, a un cliente que se vuelve cada vez más exigente y una logística que se mueve en unidades más pequeñas y con mayor velocidad.
Recalcó el directivo la aceleración del e-commerce, cambios de expectativas del consumidor; la impredecibilidad de la demanda, disponibilidad y combinación de productos; los nuevos riesgos con mayor resguardo y distanciamiento) y requerimientos, y la disrupción tecnológica.
En ese sentido, para Lavié “la clave es la impredecibilidad y el crecimiento de la demanda”, ante lo cual “hacia adentro, la tecnología y la modernización nos dio una mano vital, cómo hacer para dar seguridad a las personas, teniendo en cuenta al nuevo jugador que es la pandemia, en un marco en el que las órdenes dentro de la empresa crecieron 226%” y la promesa de entrega es la varilla con la que mide el usuario el nivel del servicio”.
El momento
Así fue que la gerenta Senior de Zebra Technologies aseguró en que “el momento de modernizarse fue hace tres o cuatro meses” y puso entre los objetivos la mejora individual de la productividad del trabajador, del equipo y del flujo de trabajo; darle una voz digital a todos los activos y su uso, y predecir lo que va a pasar, “no únicamente desde los dispositivos, sino desde toda la planeación”, dijo.
Para el supervisor de Mercado Libre “es vital modernizar y aplicar la tecnología. Entender nuestro cuello de botella y las posibilidades de mejoras. Se debe tener en cuenta la escalabilidad para que la operación pueda crecer en volumen y no deba cambiar cada mes. El objetivo principal es darle trazabilidad a cada etapa del proceso en una mejora continua tecnológica”.
“La economía y los hábitos de consumo cambiaron, estamos tratando de tomar el ritmo para satisfacer las necesidades de un cliente de tener un producto y sustituir una condición anterior que era ir por él a la tienda” indicó Cabrañes y consignó: “La vara que se puso en 2020 en términos de tecnología y de satisfacer a los clientes fue muy alta”.