Un dolor de cabeza operativo y económico

El transporte internacional de cargas volvió a padecer desde el punto de vista operativo y económico lo inestable que se torna el tránsito por el túnel internacional Cristo Redentor debido a las nevadas de la época.


La semana última no se pudo circular durante cinco días consecutivos, período que se convirtió en la más prolongada interrupción de la ruta nacional 7 en lo que va del año.

El sábado15 del actual una intensa precipitación de nieve bloqueó el paso a la altura de Puente del Inca y recién se pudo restablecer el jueves 20 a mediodía.

La paralización afectó a unos 2500 camiones que quedaron estacionados con sus cargas en playas de estacionamiento y banquinas de Uspallata, Potrerillos, Cacheuta y Agrelo en Luján de Cuyo.

La procedencia de los transportistas era variada: Brasil, Paraguay, Uruguay, Chile y la Argentina.

También hubo cientos que debieron esperar del otro lado de la frontera y padecieron los mismos inconvenientes.

La inestabilidad meteorológica registrada en lo que va de este invierno es una amenaza para el objetivo que se impusieron las autoridades viales de disminuir la cantidad de días al año en que se mantiene intransitable el túnel Cristo Redentor.

 

Los números

En 2007 fueron 22 días, al año siguiente 17, y en lo que va de 2009 ya se perdieron 14 días.

En esta oportunidad volvieron a surgir asimetrías en la velocidad de mantenimiento del corredor bioceánico considerado clave por los gobiernos del Mercosur para la integración comercial.

Aunque tienen trazados y pendientes distintas, la limpieza de la ruta nacional 7 del lado argentino suele concluirse muchas horas antes que en la prolongación del otro lado del túnel internacional: la ruta 60 en Chile.

Esto se atribuye al mejor equipamiento vial argentino producto de inversiones realizadas en los últimos años para incorporar personal y renovar las maquinarias de Vialidad Nacional mientras que los transportistas aseguran que no ocurre lo mismo con el organismo chileno.

Para los especialistas la única forma de garantizar el tránsito abierto todo el año sigue siendo la millonaria construcción de un túnel alternativo a menor altitud que los 3000 metros del Cristo Redentor.

 

deNeXos – 25/08/09 – MT

Fuente: La Nación