Bill Gates y Elon Musk se enfrentaron en un debate por la viabilidad del uso de baterías en el transporte de cargas a larga distancia.
Según Gates, los biocombustibles serían una opción más factible para los vehículos comerciales.
El futuro de los camiones eléctricos se convirtió en un nuevo capítulo de la larga disputa verbal entre el californiano Bill Gates, fundador de Microsoft, y el australiano Elon Musk, director general de Tesla, sumándose a los debates sobre biocombustibles y la pandemia del coronavirus.
Gates expresó sus dudas sobre el potencial de inversión en los semirremolques eléctricos de Tesla para el negocio del transporte de cargas a larga distancia, considerando las dificultades para que los vehículos a batería se convirtieran en una “solución práctica”. A lo que Musk se limitó a responder en Twitter, con un simple: “He has no clue” (No tiene ni idea).
El fundador de Microsoft había dicho que «el problema es que las baterías son grandes y pesadas… Incluso con grandes avances en la tecnología de baterías, los vehículos eléctricos probablemente nunca serán una solución práctica para cosas como camiones de 18 ruedas, barcos de carga y aviones de pasajeros”.
En su blog, el 24 de agosto pasado agregó: “La electricidad funciona cuando necesitas cubrir corta distancias, pero necesitamos una solución diferente para vehículos pesados de largo recorrido» y sugirió que los biocombustibles serían una opción más factible para los vehículos comerciales.
«El aumento de la competencia en el mercado significa que hay más opciones disponibles para los clientes que nunca, desde sedanes compactos hasta elegantes autos deportivos… Incluso pronto podrá comprar una camioneta pick-up totalmente eléctrica gracias a las compañías heredadas como GM y Ford y fabricantes de automóviles nuevos como Rivian y Bollinger «, escribió, pero omitió mencionar a Tesla.
En noviembre de 2017, Musk había presentado el “Semi”, un semirremolque de Clase 8 totalmente eléctrico que funciona con baterías que Tesla Inc. está desarrollando, y que tendría una autonomía de 805 kilómetros con carga completa. El camión debía llegar en 2019, pero en abril, Tesla retrasó la producción hasta 2021.
En junio, Musk ordenó a la compañía que impulsara la «producción en volumen» del Semi, que viene de serie con el piloto automático Tesla que permite la conducción semiautónoma en carreteras.
“Es hora de hacer todo lo posible y llevar el Tesla Semi a la producción en serie. Hasta ahora ha tenido una producción limitada, lo que nos ha permitido mejorar muchos aspectos del diseño. La producción de la batería y el tren motriz se llevaría a cabo en Giga Nevada, y la mayor parte del resto del trabajo probablemente se realizaría en otros estados”, dijo Musk en un memorando.
Musk respondería a Gates con más argumentos el martes día 22 de septiembre, durante el “Battery Day”, donde se podría anunciar mejoras en tecnología como la desarrolladas Tesla para fabricar en masa baterías con una densidad de 400 Wh/kg, aproximadamente 50 % más que las baterías actuales de los vehículos de la empesa.
Gates seguirá con atención esos anuncios, luego de que en su blog personal hubiera develado que es inversor de QuantumScape, en la que Volkswagen también puso dinero, ya que al parecer se encuentra bastante cerca de producir baterías con tecnología de electrolito sólido.