La logística no fue ajena a las consecuencias de la pandemia por Covid 19 y, durante el primer semestre de 2020, sus costos se vieron afectados por esa circunstancia.
La variación de junio fue con costos de transporte, 0,56%, y sin costos de transporte, 0,06%.
Durante el primer semestre del año, los costos logísticos fueron distorsionados por factores ajenos a los tradicionales, como la mayor cantidad de personal asignado a las operaciones para reemplazar a las personas de riesgo o el desdoblamiento de turnos, según los protocolos definidos, aseguró la Cámara Empresaria de Operadores Logísticos (Cedol).
La observación la realizó la cámara al difundir la evolución del Índice de Costos Logísticos Nacionales que elaboró la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) a través de su Centro Tecnológico de Transporte, Tránsito y Seguridad Vial (C3T), correspondientes a junio último.
La variación del mes para los indicadores fue con costos de transporte, 0,56%; sin costos de transporte, 0,06%; distribución con acompañante, 1,36%, y sin acompañante, 1,95%. Así, los acumulados de enero a junio fueron con costos de transporte, 12,83%; sin costos de transporte, 19,72%; distribución con acompañante, 18,11%, y sin acompañante, 17,46%
Cedol aclaró que, “esencialmente, la suba de costos contemplada en el Índice corresponde a los incrementos salariales dispuestos por la Paritaria con el Gremio de Camioneros y Afines, en el mes de marzo; así como también a la provisión de elementos de seguridad para los colaboradores, estipulados por las autoridades nacionales y el sindicato para la prestación de servicios”.
Agregó que desde el 20 de marzo, “los costos se han visto distorsionados por factores ajenos a los contemplados en el Índice, como mayor cantidad de personal asignado a las operaciones para reemplazo del personal de riesgo o desdoblamientos de turnos, según los protocolos definidos”.
Añadió que “éstas, y otras acciones, generan una pérdida significativa de la productividad en las empresas del sector, a la cual también se suma la disminución de los volúmenes operados, que provocan una importante distorsión en las tarifas variables, excluidas también en la elaboración del Índice”, tal como ocurrió en todas las actividades debido a la pandemia.
“Esta sucesión de factores genera gran preocupación en las organizaciones del sector logístico debido a que los tiempos de la pandemia se extienden y, probablemente, lo harán las medidas de seguridad excepcionales. Todo esto, desencadena nuevas operaciones en las que cada nivel de servicio tendrá que calcular un nuevo costo operativo”, completó.
Los costos que afectan las operaciones y no integran el Índice se deben a que “la actividad logística es de mano de obra intensiva y, por lo tanto, los aspectos relacionados con el personal que trabaja durante la pandemia tiene costos adicionales vinculados a la misma operación, además de los costos de traslado del personal a las distintas bases operativas.
Se sumaron los tiempos de descanso y desinfección de instalaciones y la flota de vehículos; los espacios en los centros de distribución y las bases de transferencia para el mantenimiento de distancia segura se ampliaron en forma significativa, lo que provoca mayores costos y más inversiones operativas no contempladas en los acuerdos comerciales vigentes, y la desinfección de elementos tecnológicos y operativos, en ciertos casos, varias veces por turno, según el flujo de la tarea.
Para Cedol “es clave remarcar que -aún en las actividades permitidas y cumpliendo con los mismos niveles de servicio para un mismo volumen-, se ha verificado que se requiere mayor cantidad de recursos que los proyectados. ¿Por qué? Porque se tuvieron que modificar las operaciones y se volvieron más costosas”.
