El Volvo FMX cumple una década de conducción en condiciones extremas. Hoy, es un referente para el segmento de construcción, industria forestal, oil&gas y minería.
Reser: Las posibilidades de distintas configuraciones que ofrece un FMX son innumerables.
Antes del lanzamiento del Volvo FMX, ya se ofrecían diferentes variantes de los Volvo FM y FH en la industria de la construcción. Pero tras varios años de estudios y pruebas reales, en 2010, la marca lanzó un camión desarrollado específicamente para trabajos de construcción pesada y minería, que hoy pisa firme en la Argentina.
“El Volvo FMX es un referente para las aplicaciones más exigentes, no sólo en minería, sino también para toda aplicación que busca vehículos eficientes, resistentes y que garanticen la mayor disponibilidad”, comentó Federico Reser, responsable de Producto de Volvo Trucks Argentina.
Y agregó: “Las posibilidades de distintas configuraciones que ofrece un FMX son innumerables. Este camión permite adecuarse a cada necesidad según la exigencia necesaria en cuanto a potencia de motor, configuración de ejes, reducción y relación de los ejes traseros y diversas opciones de tomas de fuerza, entre otras alternativas disponibles”.
El exterior moderno y robusto del primer Volvo FMX fue una de las características más atractivas del camión que mostró la relación con las máquinas de Volvo Construction Equipment.
Solo tres años después de su presentación, la terminal lanzó una nueva versión en la que se optimizaron aún más los componentes en busca de mayor disponibilidad, menores paradas y facilidad en la conducción. Esta nueva versión agregó, además, opciones adicionales de configuración y por lo tanto una optimización para otras aplicaciones.
Al poco tiempo, se agregaron innovaciones que garantizarían la eficiencia de este modelo, como el tercer eje desembragable y elevable para ejes traseros de doble diferencial y la dirección dinámica, capaz de reducir la fuerza en la dirección en un 80 por ciento. Ambos elementos inéditos en el mercado de camiones.
Caja de cambios
Además de contar con caja automatizada I-Shift de serie, con un programa especial para aplicaciones fuera de ruta, en 2016 Volvo Trucks presentó la innovadora versión de I-Shift con marchas súper reducidas (I-Shift ULC), que agrega dos cambios adicionales con gran reducción (32:1 y 19:1). A su vez, permite a los choferes conducir a velocidades tan bajas como 0,5 km por hora, una gran ayuda durante las maniobras de precisión, o bien para lograr tener dos vehículos en uno: la mayor capacidad de tracción y velocidades finales más elevadas cuando es necesario.
En la mayoría de las aplicaciones de construcción, minería, oil & gas o forestales, un aliado necesario para los camiones es la carrocería o equipamiento que reciben para completar la configuración.
Entre los diferenciales que ofrece la marca sueca para estos segmentos, se puede destacar la amplitud de configuraciones disponibles que ayudan a minimizar los tiempos en el carrozado, evitar modificaciones y, sin duda, a mejorar los costos finales.
Además, desde hace algunos años, Volvo también ofrece una solución integral llamada “Unidades listas”, que consiste en la oferta completa de camión más carrocería, con ingeniería compartida con el implementador, que otorga reducción en tiempos y costos, mayor disponibilidad para la entrega y la posibilidad de financiar al equipo completo.
En este caso es la compañía quien se ocupa de diseñar, calcular y verificar que el conjunto funcione de la manera necesaria antes de su entrega.
Volvo dispone los talleres in-situ, que garantizan el servicio en el lugar que el cliente necesita en el momento que lo necesita.