En una entrevista para el Suplemento Transporte & Logística de La Nación, Mario Eliceche señala que la actividad está deteriorada y le pide al Gobierno bajar la carga impositiva.
La coyuntura económica ha condicionado históricamente el desarrollo de la actividad de los transportistas, la alta presión tributaria, los costos de los insumos atados al dólar y los reclamos salariales han venido ajustando las ganancias de las empresas del sector hasta llevarlas a una situación delicada.
Esa realidad es la que ha venido enfrentando Mario Eliceche, un nacido y criado en Trelew, desde que asumió la presidencia de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), en diciembre pasado, con la decisión de darle una impronta federal al accionar de la entidad y resolver los problemas del sector.
Luego de seis meses, en los que no cesó de recorrer las cámaras del interior, el dirigente observó que “el transporte no escapa a la generalidad de la Argentina. Con una economía prácticamente parada, donde lo que funciona es la cosecha de granos, con altos y bajos, por las inundaciones en el Chaco, y Vaca Muerta con el traslado de arena y materiales. A partir de ahí, comienza a frenar”.
P: ¿Cómo encontró el sector durante sus primeros meses de gestión?
R: El sector está muy deteriorado. Tenemos una carga impositiva muy fuerte, con el agravante de las cargas ocultas de gravámenes de las provincias, porque, por ejemplo, Neuquén pide un control extra que se hace en el mismo taller que la normal, para habilitar el camión para ingresar a la zona petrolera. Tenemos costos sobre otros. Hay una terrible avidez por recaudar, en un sistema que no da más. El Gobierno dice que la logística es cara, pero nosotros no somos formadores de precios. Más de 40% de los costos logísticos son impuestos. Entonces, el formador de costos de nuestro sector es el Estado.
P: ¿En las reuniones de la Mesa logística, se planteó esta situación?
R: En la reunión que tuvimos con el Presidente, se le planteó algo que a él le llamó la atención que es que cuando una empresa compra camiones nuevos para patentarlos, hay que vender uno. Porque hay que juntar el dinero para hacerlo y, a veces, puede orillar el siete u ocho por ciento del valor de la unidad, según la provincia. O sea, que al comprar diez camiones se necesita el valor de uno para ponerlos en la calle. Hoy, quien compra un camión Euro 5 que usa gasoil más refinado con menos azufre y que contamina menos, tendría que tener el aliciente de pagar una patente más barata o no hacerlo durante los primeros dos años. Pero, resulta que un camión antiguo paga menos que otro moderno que tiene todos los sistemas de seguridad y no contamina. Algo está mal. Son las asimetrías que tiene nuestro sector.
La Mesa Logística funcionará en tanto y en cuanto no quede para la foto y el discurso. Se plantearon algunas cuestiones que generan sobrecostos o algunos temas gremiales, como que pidan el libre deuda sindical para poder cargar. La Federación busca sumar para salir de la coyuntura, porque si no tenemos un transporte sano, fuerte y eficiente no es un país viable. Hoy estamos en terapia intensiva, con pronóstico reservado.
P: ¿Cuáles serían los resultados concretos que esperan de la Mesa?
R: Estamos peleando por el Impuesto al Combustible Líquido. Además, el transporte internacional puede tomar 45% a cuenta de pago de IVA, que se acumula como crédito, pedimos aplicarlo a Ganancias. Solicitamos un precio federal para el combustible. YPF lo mejoró en 2%, pero había diferencias de hasta 10%, por lo que esto es sólo 20% del total.
Son esas asimetrías, para las que se necesitan respuestas rápidas, pero, no sé si por cuestiones políticas, por la coyuntura electoral o la época del año, todo cuesta mucho.
P: ¿Cuáles son los reclamos que llevan a los funcionarios en esas reuniones?
R: Pedimos al Gobierno que revea la base no imponible, a partir de la cual se comienza a pagar el Impuesto a las Ganancias, porque la inflación ha sido demasiado alta y esa base no se modificó. Entonces, eso nos perjudica, porque los choferes quieren viajar menos, debido a que cuantos más kilómetros hacen, menos cobran.
Además, queremos ver que nos bajen la carga impositiva. Salió un plan de pago de 60 cuotas, pero necesitamos acomodar los planes caídos y que nos den aire para lo que viene, porque cada mes que pasa es un pedacito más que vamos perdiendo de las empresas. La inventiva ya no alcanza. Necesitamos hechos concretos para estar mejor. Seguimos siendo optimistas, de lo contrario no estaríamos acá.
P: ¿Cuál es la respuesta del Gobierno a los planteos de los empresarios?
R: Es “ni”. Nos dicen: vamos a ver cómo mejoramos; veremos cómo lo modificamos; se va a bajar la presión impositiva; lo primero es tener déficit cero, porque el primer compromiso hoy es con el Fondo. Se entiende, porque si no la Argentina no tiene crédito. Pero llegar a déficit cero con una carga impositiva terrible… habrá que ver de dónde va a salir el dinero. Nosotros ya no estamos en condiciones de seguir aguantando.
Estamos frente una paritaria que se inicia el primero de junio con un sindicato que está hablando que pedirá 50% de aumento, mientras venimos perdiendo capital de trabajo. Cada día, un transportista se come un pedacito del camión, porque está trabajando debajo del costo, no puede reponer ni hacer el mantenimiento. Esta es una muerte lenta. Si esta tendencia no cambia, de acá a fin de año va a haber empresas que no se van a poder levantar.
P: ¿Cómo va a ser la discusión en paritarias?
R: Moyano sabe que estamos en el mismo barco y tenemos que sentarnos a ver cómo lo llevamos a buen puerto, porque si se hunde, ellos vienen con nosotros. Esta coyuntura la tenemos que pasar. Puede que empiece a mejorar a fin de año, después de las elecciones, que el dólar se quede quieto y se logre una inflación menor al dos por ciento. Somos optimistas y tenemos esperanza. Pero, combustible, autopartes, neumáticos y peaje, están atados al dólar y, cuando se mueve, suben. Lo único que se ha quedado retrasado respecto del dólar son los sueldos. Acá no está ganando nadie, porque la empresa que tiene que generar riqueza está produciendo pérdidas.
P: El otro tema es el retraso en la concreción en el interior de las obras de infraestructura anunciadas.
R: Había una buena idea del Gobierno que eran las PPPs, con las que se conseguía un financiamiento genuino para hacer obras. Pero, después del tema de los cuadernos eso murió. Si no hay transparencia, el financiamiento externo no llega, a lo que se debe sumar la movida política que hay hoy. Entonces, todo está en stand by, hasta que pase la tormenta.
P: ¿Cuál es el planteo de la Fadeeac ante la situación actual?
R: Estamos para sumar. Estamos en una crisis debida a muchos años de hacer las cosas mal y gastando lo que no teníamos. Este Presidente, con aciertos y errores, debe tener la mejor intención de sacar al país adelante, espero que lo logre rápido o el que venga. Queremos que en diciembre asuma el que maneje mejor la Argentina. Pruebas hubo bastantes, cada votante tendrá que hacer su propio análisis y espero que elijamos el mejor piloto de tormentas.