A nivel regional, Buenos Aires es la ciudad que más metros de oficinas tiene proyectados construir en los próximos cinco años.
Sobre las principales ciudades de Sudamérica, según un estudio de Cushman & Wakefield, Buenos Aires podría sumar entre 2019 y 2023 alrededor de 800.000 m² de oficinas Premium, una cifra similar a la que se construyó en Lima entre 2014 y 2018.
Para poder dimensionar el tamaño del mercado de oficinas de cada una de las ciudades, se calculó el ratio de metros cuadrados de oficinas por cada 1.000 habitantes. De este análisis, resultó que Buenos Aires está en el puesto más bajo con un ratio de 96. El ranking es liderado por Santiago de Chile con 234, seguida por Bogotá (167), Lima (161) y San Pablo (151).
Herman Faigenbaum, director general de Cushman & Wakefield Cono Sur, explicó: “La cantidad de edificios de oficinas que tiene una ciudad sirve para medir y entender la cantidad de inversión en activos de largo plazo que tiene cada país, y las condiciones del sistema financiero, ya que las inversiones de capital intensivo tienen gran dependencia del mismo”.
El estudio muestra que Santiago de Chile tiene un inventario de oficinas Premium de 1,67 millones de m², que supera al de Lima, Bogotá y Buenos Aires, porque es un mercado que ofrece muy buenas condiciones para la inversión a largo plazo. Esto se traduce en buena accesibilidad a fuentes de financiamiento y un mercado estable, principal atractivo para realizar este tipo de inversiones.
Lima se posiciona actualmente como uno de los mercados de oficinas emergentes más importantes de Sudamérica, detrás de Santiago de Chile, plaza consolidada a nivel continental.
Bogotá muestra un desarrollo similar a Lima. El inventario de oficinas clase A registró un crecimiento del 87% en los últimos cinco años, hasta 1,43 millones de m² con la diferencia de que registró un muy buen desempeño de la demanda de oficinas en 2018, impulsado por un contexto de crecimiento económico.
Los datos recabados muestran que entre 2014 y 2018 San Pablo y Lima fueron las ciudades que tuvieron la mayor producción de nueva superficie, seguidas por Bogotá y Santiago. Buenos Aires ha quedado atrás no sólo por las condiciones políticas y económicas inestables de los últimos años, sino también porque la financiación para inversiones a largo plazo es muy escasa. Justamente el mercado de oficinas es de capital intensivo, donde se necesita financiación para desarrollar.
Por otro lado, al observar el ciclo del mercado, Buenos Aires se encuentra en un estado de renta elevada con un promedio de US$ 33 m²/mes, que se preserva en parte por el reducido tamaño del inventario de oficinas Premium. Sin embargo, la inestabilidad política y económica está impactando en el nivel de renta, que empieza a decaer y supone oportunidades futuras para los inquilinos.