En previsión del próximo Encuentro Cedol, su responsable, Carlos Musante, desarrolló los ejes sobre los que girará el debate.
Eduardo Pérez
La Cámara Empresaria de Operadores Logísticos (Cedol) tendrá el 18 de abril su Xº Encuentro y cómo en los anteriores, la entidad tratará un tema que supere al trabajo diario. En ediciones pasadas se dedicó a los costos ocultos, el marco jurídico, el costado financiero, el tema comercial y este año será el turno de los sistemas y tecnologías, que estará acompañado por el libro “Up Grade en Sistemas y Tecnologías en Operaciones Logísticas”, que se presentará ese día.
“Desarrollamos una publicación bastante extensa, donde tocamos en cada capítulo una tecnología que esté siendo aplicada en la Argentina, los autores cuentan las dificultades, las ideas, los detalles y los resultados. Es casi un inventario de las tecnologías que están funcionando. Además, le incorporamos un capítulo en el que se precisa cómo están estas tecnologías en el resto del mundo”, explicó Carlos Musante, responsable del Encuentro.
¿Cómo está la logística argentina respecto del resto del mundo?
La Argentina está bien. Cuando se leen estos trabajos y se verifica con visitas, se ve que la Argentina está evolucionando, no es un país del hemisferio Norte, pero en Latinoamérica lidera, junto con Brasil lo que es la operación logística. Más allá de los costos, que en general se refiere al transporte, desde la logística se debe ganar competitividad optimizando las operaciones y, por ende, procesar más con la misma cantidad de gente y de equipos.
¿En qué nivel está hoy el sector en la aplicación de sistemas informáticos?
La de sistemas hoy ya es un lugar común: hoy una empresa sin un warehouse sistem adecuado no podría controlar nada del inventario que tiene, en una economía en donde cada vez hay más partes y componentes diferentes, con códigos distintos. Sin un sistema adecuado para el control del funcionamiento, del almacenamiento, del transporte y la distribución no sería posible manejarse en forma eficiente y eficaz; tendría serias dificultades en el armado de los despachos, en el manejo del inventario.
¿En el caso de las tecnologías, cuál es la situación actual?
La otra etapa, la de incorporación de tecnología, podría llamarse de robotización, aunque no se trate de robots, porque lo que hay –en realidad- es tecnología de movimiento que facilitan las operaciones y las hacen más productivas. Ya vamos a enfrentarnos a esa realidad, aunque la logística, a diferencia de los procesos fabriles, todavía tiene mucho componente manual, porque hay los procesos son diferentes, no es una línea de producción. Pero, la tecnología es mucho más onerosa, por eso en el libro tratamos también la forma de evaluar la inversión, cuándo conviene o no hacerla.
¿Qué escollos se encuentran en ese sentido?
Un problema que tenemos es la aplicación de la tecnología con la realidad local. En Andreani advirtieron que la mejor tecnología europea no tenía previsto el uso de remitos de papel, como se hace en las operaciones locales y tuvieron que buscar una empresa local que desarrolle un equipo para manejar papeles.
Algún día vamos a dejar de usar papeles. No tiene sentido usar papeles, cuando hay sistemas como el Código de Operación de Transporte (COT) o remito electrónico y los operadores tienen sistemas que pueden emitirlos. El Estado es el que tiene que evolucionar en ese sentido.
¿Hacia dónde se debe ir en el ingreso de las tecnologías en la operación?
Hay que pensar la tecnología como un elemento a incorporar que sea para el bien de toda la sociedad, lo que puede tener cierta dificultad, porque puede haber quienes se queden sin trabajo. Tenemos que llegar a ser más eficientes, sustentables y tener una economía interna más competitiva, para poder exportar mejor y lograr una mejora social, incluyendo a todos en el modelo de tecnología, sino alguien va a perder.
¿La tecnología podrá terminar con los costos ocultos en la operación logística?
Los ocultos están en las cuestiones impositivas, sindicales, previsionales, de transporte. La tecnología no los puede evitar, pero ayuda a hacer que el proceso sea mucho más productivo, por ende se van a lograr mejores resultados con la misma inversión.