El Departamento de Seguridad Interior (DHS) de los EEUU, anunció nuevos requisitos para la carga marítima destinada a ese país.
La norma, que se hará efectiva a partir del 26 de enero, exigirá a los transportistas marítimos y a los importadores, la presentación de información adicional ante la autoridad aduanera y de protección de fronteras (CBP9, antes de que se permita la entrada de sus barcos al país.
La regla requiere de los transportistas la presentación de un plan de estiba del buque y de mensajes de estado de contenedores bajo ciertos escenarios en que los contenedores sean destinados a los EEUU. Por su parte, los importadores o sus agentes deberán presentar un Formulario de Seguridad de Importación (ISF), con ocho datos, no más allá de las 24 previas del embarco de una carga con destino a los EEUU. Los datos incluyen, entre otros, información sobre el vendedor, comprador, país de origen, y diferentes números identificatorios (de importador, de consignatario, etc).
La regla permite cierta flexibilidad con respecto a la presentación de algunos de los datos del ISF, que pueden ser actualizados hasta 24 horas antes del arribo del buque a puerto estadounidense.
El ISF tendrá que incluir también la ubicación del contenedor y datos del consolidador, que deberán presentarse a más tardar 24 horas antes del arribo del buque.
Redacción deNeXos
MT