Las estaciones de servicio reflejaron diferentes valores en sus pizarras, según la empresa que la embandera, luego del incremento de precios. Es la primera suba que disponen las compañías después de que comenzara a regir el 1° de octubre la liberación de los valores de los hidrocarburos.
Las principales petroleras que operan en el mercado de combustibles aumentaron entre un 9 y un 12 por ciento los precios del gasoil y las naftas súper y premium en todas las Estaciones de Servicio del país.
Se trata de la primera suba que disponen las compañías luego de que comenzó a regir, el pasado 1° de octubre la liberación de los valores de los hidrocarburos, al caer el acuerdo alcanzado en enero por las empresas productoras y las refinadoras.
La medida no impactó en todas las banderas por igual, dejando en claro cómo se desenvolverá el mercado de ahora en más. YPF fue la que se posicionó nuevamente como la más barata despegándose por unos centavos de Axion, que hasta ayer se equiparaban en las pizarras.
Shell por su parte, no modificó su estrategia de ubicarse como la más cara, mientras que Pampa (Petrobrás) se mantuvo en un segmento medio al igual que Oil Combustibles. Las blancas, en tanto, luego del impacto que sufrieran tras el incremento de los precios mayoristas, quedaron un escalón por encima de las embanderadas.
¿Será esta la estrategia que definirá los pasos a seguir a partir de ahora por cada una de firmas? Según analizan los expendedores, al ser este un mecanismo tan dinámico, se desatará una fuerte competencia que podría modificar el escenario actual.
Al respecto, Alberto Fiandesio, ex Subsecretario de Combustibles de la Nación, opinó que la liberación de los precios es un beneficio en sí misma siempre que venga acompañada de una intensificación de la tarea de dos pilares en toda apertura: la Defensa de la Competencia y la Defensa del Consumidor.
Para el ex funcionario, se debiera monitorear desde el Estado si la libertad de precios no termina en un aprovechamiento de la industria sobre las dificultades que para importar pueda tener el mercado.
Fiandesio explicó que “esto no es difícil de seguir ya que los valores que se utilizan para el cálculo de la paridad de importación son públicos”. Y agregó: “Otro control que debería realizarse es el seguimiento del Margen Bruto de Refinación, entendiendo como tal a la diferencia entre el valor planta de despacho de la producción y el precio del crudo utilizado para elaborarla. Este índice puede no tener, como valor absoluto, un significado importante pero sí puede ser utilizado para verificar cómo evoluciona en el tiempo”.
Fuente: Surtidores – agp – 24 de octubre de 2017