La industria 4.0 permitirá que los procesos físicos sean monitoreados por máquinas que se comuniquen entre sí
En la fabricación tradicional, las líneas de ensamblaje de productos requieren de alguien supervisando los niveles de inventario, asegurando el correcto mantenimiento de las máquinas o identificando posibles mejoras en los procesos, informó Carlos Ciminieri, presidente de Blue IT Argentina.
La industria 4.0 nace mediante el aprovechamiento de la Internet de las Cosas y la colocación de etiquetas y lectores RFID sobre los productos o sobre las máquinas. De este modo, los fabricantes permiten que los procesos físicos sean monitoreados por máquinas; y las máquinas y productos se comuniquen y trabajen juntos, con seres humanos, en tiempo real. La tecnología RFID es una parte integral de la Internet de las cosas y un elemento clave de la industria 4.0. Con una solución de RFID, todos los productos son etiquetados y se colocan lectores alrededor de una instalación o incrustados en las propias máquinas, permitiendo identificar estado y ubicación de un producto; automatizar los procesos, simplificar el mantenimiento de las máquinas para evitar tiempos de inactividad, y permitir la personalización de productos en base a las preferencias del cliente.
Los automóviles tienen un proceso de fabricación complejo. Sus piezas deben ser localizables dentro de la instalación y colocadas en el momento justo que permita que la línea de producción no se detenga.
A medida que un producto etiquetado se mueve a través de la línea de montaje, se encuentra con decenas de interacciones de la máquina. Si está etiquetado con una etiqueta RFID grabable, el estado del producto se puede actualizar en cada paso del proceso.
El etiquetado de productos también ofrece flexibilidad. En lugar de tener que configurar las máquinas para construir una variante de un producto a la vez, las máquinas pueden programarse para construir cientos de configuraciones.
Otro de los beneficios es la gestión de la retirada de productos. Cuando se etiquetan los productos y piezas, algunas partes específicas pueden asociarse con el producto específico en donde se encuentran instaladas. Esto brinda una mayor visibilidad en una línea de productos, permitiendo identificar y retirar sólo los productos que contienen esa parte específica.
Además de los muchos beneficios de la utilización de RFID para permitir la comunicación entre los productos y las máquinas, también se puede aprovechar una infraestructura RFID para recoger datos valiosos en las instalaciones.
La Industria 4.0 no reemplaza trabajadores, por el contrario, ayuda a mover la fuerza de trabajo en puestos más cualificados en lugar de hacer un montaje básico del producto o el seguimiento de una sola máquina. En lugar de ello, los trabajadores pueden gestionar varias máquinas a la vez, y usar los datos recogidos para mejorar los procesos en toda la instalación.
Blue IT Argentina es una empresa nacional con más de 10 años de experiencia proveyendo soluciones integrales en materia de identificación e impresión, que ofrece tecnologías de lectura de datos para la identificación de procesos, productos o partes, y la integración a los procesos productivos existentes.
15 de noviembre de 2016 – Fuente: Impinj – ep